Avena
EveryDay Health destaca la avena como una buena fuente de fibra soluble, “que puede ayudar a reducir la diarrea al absorber el agua en el intestino y retrasar el vaciado de los intestinos”. No tiene por qué ser insípida; hay ciertas hierbas y especias como la canela que pueden añadir sabor a la avena, al tiempo que ofrecen sus propias propiedades curativas.
La fibra insoluble es lo que hay que intentar evitar cuando se tiene Crohn, ya que puede irritar los intestinos, añade. Este tipo de fibra se encuentra en algunas fuentes de nutrición recomendadas, como los cereales integrales y ciertas verduras, explica.

Pescados Grasos
Healthline sugiere el pescado -pero no cualquier pescado- cuando se trata de un brote de Crohn. Sugiere la variedad más “aceitosa”, que incluye el salmón, el atún y el arenque.
Estos tipos de pescado graso contienen ácidos grasos Omega-3, “que tienen propiedades antiinflamatorias y pueden ayudar a reducir el agravamiento que causa los peores síntomas”, explica la fuente.

Quesos
A menos que usted sea intolerante a la lactosa (los síntomas de una alergia a los lácteos pueden imitar un brote de Crohn), el queso puede ser una gran adición a su dieta de Crohn. Healthline.com afirma que el queso es una forma ideal de aportar calcio sin tomar leche, pero añade que “es importante saber que para algunas personas con Crohn, los productos lácteos pueden ser difíciles de digerir”.
Puede elegir las variedades de queso que contienen menos lactosa en la familia de los quesos, como el suizo y el cheddar, añade. No se recomienda añadir queso a una comida grasienta (como una hamburguesa con queso, por ejemplo), ya que pueden provocar gases y diarrea.