La gastritis, una enfermedad que implica la inflamación, la irritación o la erosión del revestimiento del estómago, puede producirse de forma repentina o gradual como resultado de muchos factores diferentes. Entre las causas más comunes están el consumo excesivo de alcohol, el estrés o el uso de ciertos medicamentos. Pero también puede producirse debido a una infección, a un reflujo biliar o a bacterias poco saludables en el revestimiento del estómago.
Cualquiera que sea la causa, el ajuste de la dieta es una parte importante del tratamiento rápido de la gastritis. Como el revestimiento del estómago se ha visto comprometido, es necesario eliminar cualquier alimento que pueda agravar aún más el problema, pero también es igualmente importante aumentar el consumo de aquellos que puedan aliviarlo.
A continuación, le presentamos una lista de cuatro alimentos que debe consumir y otros cuatro que debe evitar cuando intente tratar la gastritis.
Qué debes comer:
Alimentos ricos en fibra
Dado que la fibra, sobre todo la insoluble, ayuda a mover los alimentos a través del sistema digestivo, el consumo de alimentos ricos en ella es especialmente beneficioso para quienes padecen gastritis.
Por suerte, no es difícil encontrar buenas fuentes de fibra dietética. Las frutas como las manzanas, los plátanos, las naranjas y las frambuesas son especialmente ricas. También lo son las verduras como las zanahorias, la remolacha y el brócoli. Los cereales integrales -como el arroz integral, la cebada y la quinoa- también son ricos en fibra, al igual que la mayoría de las legumbres.